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Saúco, un coadyuvante para tratar enfermedades inflamatorias

El saúco, un árbol lleno de antioxidantes y fotoquímicos que soluciona desde la gripe, hasta problemas urinarios e infecciones.

Un árbol que se usa ancestralmente  para aliviar los cuadros gripales, es el saúco, un verdadero regalo de la naturaleza por las muchas propiedades que  brinda a la salud.

Su madera siempre ha sido muy apreciada, de hecho: su nombre deriva del griego “sambuke”, nombre de un instrumento musical semejante a un arpa que se fabricaba a partir de ella.

¿Qué es el saúco?

El saúco (Sambucus nigra), es un  árbol que crece hasta 9 metros de altura, originario de Europa aunque también se cultiva ampliamente en otras partes del mundo.

Tiene pequeñas flores blancas anuales, que luego se convierten en bayas de color negro azulado, con un sabor agrio que impide que se consuman crudas.

Contiene gran cantidad de compuestos bioactivo, útiles desde muchas perspectivas, algunos de los cuales son:

  • Vitamina C: con 52 mG por cada taza de sus frutos, representa el 57% del requerimiento diario.
  • Fibra dietética: Las bayas contienen 10 gramos por taza, aproximadamente el 36 % del valor diario recomendado.
  • Ácidos fenólicos: con acción antioxidante.
  • Flavonoles antioxidantes: sambucina, quercetina, kaempferol, sambunigrinae isorhamnetina.
  • Antocianinas: le dan a la fruta su característico color negro azulado, con efectos antioxidantes y antiinflamatorios.

¿Para qué sirve?, propiedades del saúco

El saúco brinda sus beneficios porque la combinación de nutrientes que posee, ayuda a tratar varias afecciones.

Combate el resfrío y la gripe:

  • Su extracto ayuda a reducir la duración y la gravedad de los síntomas causados ​​por el virus de la influenza.
  • Inhibe el crecimiento de bacterias, por lo que puede mejorar los síntomas de la sinusitis y la bronquitis.
  • La infusión de sus flores tiene acción  expectorante, lo que ayuda a  mejorar el estado de los pulmones en cuadros de tos y resfriado.

Reduce el azúcar en sangre:

  • Inhibe la enzima alfa-glucosidasa, lo que ayuda a reducir los niveles de azúcar en la sangre.
  • Aumenta la secreción de insulina, un efecto que estabiliza los niveles de azúcar en la sangre.

Combate la inflamación:

  • Contiene antocianinas, compuestos que reducen la inflamación al bloquear la producción de óxido nítrico, que sirve como molécula de señalización para desencadenar la inflamación.

Depura el organismo:

  • La sambucina tiene efecto diurético, lo que ayuda a eliminar líquidos y toxinas mediante el aumento de la secreción de orina.
  • También reduce los niveles elevados de ácido úrico en la sangre, lo que previene la hipertensión, además de cuadros de gota.

Previene enfermedades:

  • Sus bayas tiene 3,5 veces más poder antioxidante que las vitaminas, por lo que pueden prevenir enfermedades crónicas como diabetes, artritis, cáncer o problemas cardiacos.
  • Sus bayas son ricas en polifenoles y vitamina C, compuestos que respaldan la defensa inmunológica al aumentar la cantidad de glóbulos blancos y otras células inmunitarias.

Usos del saúco

Varias partes del árbol de saúco utilizan con fines medicinales y culinarios. En la medicina popular, las bayas secas se usan para tratar la influenza, algunas infecciones, ciática, dolor de cabeza, dental, cardíaco o nervioso.

Con el zumo de las bayas, se preparan  jarabes, mermeladas, jaleas, y algunas bebidas, como una ginebra llamada «beers vlierke».

Las hojas se aplican tópicamente en cataplasmas o emplastos para aliviar esguinces, golpes, sabañones, quemaduras y heridas.

Las  flores se hierven con azúcar para hacer un jarabe dulce o se infunden en té para tratar la tos, bronquitis y resfríos, ya que poseen una acción expectorante.

Fuente natural del saúco

Todas las partes del árbol del saúco se aprovechan para muchos propósitos; por ejemplo, su madera es muy apreciada en la fabricación de utensilios e instrumentos musicales.

Las flores y las hojas comúnmente se usan en infusiones para tratar una diversidad de trastornos, además de procesarse para fabricar suplementos, jarabes, ungüentos  y tinturas.

Los frutos o bayas son ligeramente tóxicos cuando están verdes y crudos, por lo que deben cosecharse cuando tienen un color negro azulado para luego procesarlos,  a fin de  eliminar las toxinas.

Suplementos de saúco

Los suplementos de saúco para el tratamiento de los resfriados vienen en varias formas, como polvos, jarabes, tinturas, cápsulas, pastillas y gomitas.

Los ungüentos tópicos son muy populares para tratar todo tipo de lesiones, como esguinces, cortaduras y quemaduras.

También puedes encontrar  las flores y las hojas deshidratadas para preparar infusiones.

¿El saúco tiene efectos secundarios?

Las bayas crudas y sin madurar del saúco, contienen un tipo de veneno conocido como glucósido cianogénico, sustancia que puede liberar cianuro en el organismo. La solución para inhibirlo es cocinarlas antes consumirse para eliminar estas toxinas de forma segura.

Incluso las bayas maduras contienen trazas de este veneno, por lo que masticarlas puede inducir  una intoxicación que rara vez pone en peligro la vida. Sin embargo puede causar náuseas, vómitos, diarrea, mareos, entumecimiento, distensión abdominal y dificultad para respirar.

Por esta razón, no se recomienda para  niños, mujeres embarazadas o madres lactantes. Además, debido a que puede  estimular el sistema inmunológico, las personas con trastornos autoinmunes no deben consumirlas.

Bibliografía científica sobre el saúco

En 2016, un estudio australiano examinó los efectos de la baya del saúco en un grupo de 312 de pasajeros que volaron en un gran período de tiempo. Se encontró que quienes tomaron el extracto 10 días antes y cinco días después del vuelo, tuvieron un 50% menos de días de enfermedades como resultado de un resfriado.  Además, tuvieron  síntomas menos severos en el tracto respiratorio superior.

Las antocianinas que contiene, reducen la inflamación al bloquear la producción de óxido nítrico por parte de las células inmunitarias. El óxido nítrico sirve como una molécula de señalización que desencadena la inflamación, pero al bloquearlo evita esa respuesta natural, según un estudio publicado en 2017.

Un estudio realizado en 2005, encontró que el estado antioxidante mejoró 1 hora después de beber 400 ml de su zumo. De forma similar, otro estudio en roedores encontró que el extracto ayudó a reducir la inflamación y el daño tisular oxidativo.

Un estudio encontró que sus flores inhiben la enzima alfa-glucosidasa, lo que puede ayudar a reducir los niveles de azúcar en la sangre. Además, la investigación con animalitos con diabetes que recibieron el suplemento, mostró un mejor control del azúcar.

Según  un estudio publicado en la revista “Pulse” en 2016,  las bayas pueden reducir los niveles de ácido úrico elevado en sangre, que está relacionado con hipetensión y efectos negativos en la salud del corazón.

Un estudio publicado en 2017, ha descubierto que sus bayas inhiben el crecimiento de bacterias como Helicobacter pylori, por lo tanto, puede mejorar los síntomas de la sinusitis y la bronquitis.


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