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Al empezar la temporada debes sentir una fuerte sacudida que significa un nuevo camino con nuevos objetivos, con motivación para entrenar y esto ?es sentirse NAT?.
Comenzaste un nuevo régimen de entrenamiento, el entrenamiento va bien y te encuentras lleno de ambición por lograr tus objetivos de acondicionamiento físico. y ya has encontrado tu motivación para entrenar… ¿y ahora?…
De hecho, a inicios del año, se siente como si tuvieras que contenerte para no exagerar después de las fiestas de fin de año, ¿no?.
El punto es que con esta oleada de frío, de repente, te pierdes un día. De forma lenta pero segura, tu falta de motivación (o cualquier motivo de emergencia) puede hacer que tu programa de entrenamiento no se desarrolle y empiezas a ver como tus objetivos se desvanecen.
Bueno, no te preocupes, esto es completamente normal y les sucede a todos. Estos consejos te ayudarán a entender cómo recuperar tu motivación para entrenar y mantenerte en la buena senda, mientras en algunas zonas el invierno va pasando.
Visualiza tu éxito
Cuanto más a menudo imagines algo, mayor será la posibilidad de que tu idea se convierta en realidad.
Los deportistas de élite imaginan sus juegos, carreras y competiciones una y otra vez para ayudarse a sí mismos a tener éxito. Funciona de la misma manera para tus objetivos de entrenamiento.
¿Quieres correr más rápido o quizás simplemente construir un cuerpo más fuerte?
Comienza imaginando cómo será cuando lo hayas logrado.
Imagina tu objetivo con todos tus sentidos: ¿en qué te ayudará un mejor físico? ¿cómo se sentirán los músculos bien entrenados al tacto? ¿cómo te verás ante los demás?.
Utiliza el poder del lenguaje y anímate en voz alta para mejorar tu fuerza mental, pensando que las estrategias de atención plenas te ayudarán no solo a superar tus dudas, sino a coger motivación para entrenar.
Varía y usa tu imaginación
Por supuesto, tu motivación y rendimiento físico pueden variar de un día a otro. A veces, te sentirás en forma y lleno de energía y otros días, te sentirás débil y sin energía.
Las causas de esto no son solo físicas; es que a menudo tu mente puede ir jugándote una mala pasada.
El desarrollo muscular tiene que ser divertido y tienes que lograr resultados; de lo contrario, tu motivación se verá afectada. Por lo tanto, no le des una oportunidad al aburrimiento e introduce algo de diversión y variedad para que vayas teniendo más motivación para entrenar.
- Entrena con tus amigos, tu familia o tus hijos, incluso en casa o con ejercicios que además de activar tus músculos, te servirán para coger nueva energía e ir al gimnasio.
- Prueba un cambio de escenario: no siempre tienes que hacer ejercicio en el mismo lugar, entonces mezcla un poco las cosas y haz ejercicio en diferentes lugares en el patio, en un parque o en casa en su sala de estar, para luego volver al gimnasio.
- Sigue el ritmo correcto: el ritmo correcto ya sea (un vídeo o una música) puede llevarte a la cima de las actuaciones y realmente elevar la motivación para entrenar.
Entrena en el momento correcto
A medida que avanza el día, TU “yo más débil se vuelve cada vez más fuerte”… una vez que llegues a casa del trabajo y te relaje en el sofá, no podrás volver a levantarte.
Entonces, trata de burlar a “TU yo más débil” y sal a correr o haz ese entrenamiento de peso corporal que tanto te gusta por la mañana. Y, por la tarde, antes de volver a tu hogar, ve al gimnasio a entrenar como te gusta, con toda esa adrenalina que tanto disfrutas.
Desafíate a ti mismo
No hay nada mejor que lograr tus objetivos deportivos, pero necesitas nuevos desafíos si quieres seguir haciendo ejercicio de forma regular, ¿qué tal un nuevo plan de entrenamiento?.
Aunque elijas un plan de entrenamiento de peso corporal de tres semanas para comenzar nuevos hábitos, un régimen de entrenamiento diseñado para perder peso o un brutal entrenamiento de 12 semanas para coger músculos, lo ideal es hacerlo y seguirlo hasta finalizarlo, lo que te permitirá mantener la motivación para entrenar.
¿ Te animas a modificar tus hábitos ?