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Hornear productos deliciosos forma parte de nuestra tradición, pero hacerlo correctamente puede «« hacer sentirnos NAT »».
Tal vez te estas preguntando ¿cómo hornear en casa puede ser «saludable» o mejorada sin sacrificar el sabor?
En realidad esta no es una tarea fácil, puesto que es fácil hacerte unos panes y galletas rápidos sin sabor después de exagerar con ingredientes «saludables».
Pero no se trata de quitar ingredientes, si no de lograr que los productos horneados de todo tipo puedan ser «saludables» para ti en un momento dado, y que ningún alimento deba estar prohibido en tu dieta.
Para lograr esto, existen algunas estrategias a prueba de fallas que pueden ayudarte a hornear en casa, logrando un equilibrio entre el sabor y los ingredientes buenos para tu salud.
Utiliza el puré de calabaza
El puré de calabaza se puede utilizar como sustituto de una grasa, como mantequilla o aceite, en una proporción de 1:1.
Esto significa que si una receta requiere 1 taza de aceite, puedes sustituirla por 1 taza de calabaza. Además, es un excelente ingrediente para hornear porque tiene un toque de dulzura y mucha humedad.
Puedes disfrutar de panadería, magdalenas e incluso galletas.
Por ejemplo, puedes sustituir la mitad de la cantidad de mantequilla o aceite con el puré de calabaza, es decir, 1/2 taza de calabaza y 1/2 taza de mantequilla para una receta que requiere 1 taza de mantequilla.
De esta manera, aún puedes obtener el sabor y la textura de la mantequilla, que es imposible de replicar, con un poco menos de grasa saturada.
Adicionalmente, la calabaza también proporciona vitaminas y minerales, como vitamina A y potasio, así como algo de fibra saludable para tu corazón.
Usa la mantequilla de buena calidad
Aunque existen excelentes sustitutos como el puré de calabaza, no es necesario evitar la mantequilla por completo, ya que la grasa es un componente fundamental de una dieta saludable.
Esto se debe a que ayuda tu cuerpo a absorber importantes vitaminas liposolubles como A, D, E y K, apoya la producción de hormonas, el crecimiento celular, protege tus órganos, promueve la saciedad, etc.
La mantequilla es una muy buena fuente de grasa y las cualidades que proporciona en los productos horneados, ayudan a que los alimentos sean deliciosos y benéficos.
Recuerda que si usas solo sustitutos de mantequilla bajos en grasa, el producto final puede ser menos saciante y, en última instancia, hacer que comas mucho más de dicho producto horneado.
Por tanto, cuando uses mantequilla para hornear, busca un producto de buena calidad, como la que proviene del ganado alimentado con pasto que ha demostrado contener menos grasas saturadas y más grasas monoinsaturadas, en comparación con la mantequilla elaborada con animales alimentados con cereales.
Agrega verduras y frutas
Una de las formas más fáciles de aumentar el contenido de nutrientes de un producto horneado, es agregar frutas o verduras, además que también proporcionan un sabor y una textura increíbles.
Por ejemplo, puedes agregar vitamina A con zanahorias o calabacines rallados ricos en fibra, al hornear panes, magdalenas e incluso galletas. Los arándanos, las manzanas y los plátanos llenos de antioxidantes también son súper versátiles y funcionan bien en varias recetas.
Las frutas y ciertas verduras, como la remolacha o las zanahorias, también pueden agregar un toque de dulzura a las golosinas horneadas y pueden, ayudar a reducir un poco la cantidad de azúcar necesaria en una receta.
El azúcar es azúcar
Sin lugar a dudas, el azúcar ayuda a que los productos horneados tengan un sabor dulce y delicioso, pero el consumo de azúcar agregado (es decir, el tipo de azúcar en los productos horneados), puede contribuir a varios problemas de salud si se consume en grandes cantidades durante períodos prolongados.
Pero ir al extremo de eliminar todo el azúcar de tus preparaciones o reemplazarlos con ingredientes que no son sustitutos del azúcar o son súper procesados es contraproducente.
En lugar de esto, usa azúcar cuando se requiera en una receta, o reemplaza un poco, pero no todo, con frutas o verduras, disfrutando de tus productos horneados de vez en cuando dentro del contexto de una dieta variada y rica en vegetales y frutas.
También puedes utilizar otros tipos de azúcar al hornear, como miel y jarabe de arce o de agave, siempre y cuando no abuses.
Recuerda al hornear, ¿qué?
Cuando se trata de productos horneados “saludables”, existe un equilibrio que se puede lograr entre los ingredientes más densos en nutrientes y los viejos recursos como el azúcar, la harina y la mantequilla,
Los productos horneados pierden su propósito si no saben bien o no son lo que deben ser, “productos horneados”.
Por eso, no dudes en experimentar en la cocina con varios ingredientes para aumentar el contenido de nutrientes, sin perder de vista el verdadero propósito de hornear: “disfrutar de las delicias que preparaste”.
¿ Cuáles son tus recetas favoritas ?